fallodietaCuando nos proponemos seguir una dieta alimenticia para perder peso, lo primero que pensamos es que serán días de sacrificio en beneficio de nuestra figura y salud. Pero qué ocurre si sigues al pie de la letra tu dieta, y aún así no adelgazas… Lo más probable es que te sientas desilusionada y con pocas ganas de continuar.

Entrebellas quiere ayudarte a conseguir el éxito final de tu dieta, para ello te contamos cuáles son las principales causas de que una dieta sea poco efectiva o vaya en contra de tu salud. Identifica cuál es tu caso, y replantea tu régimen alimenticio, así lograrás perder peso en el tiempo correcto.

  1. Casi la mitad de personas abandonan las dietas por aburrimiento, cuando estas incluyen siempre los mismos alimentos. Ten en cuenta que una dieta equilibrada no puede ser monótona o aburrida, ya que debe incluir frutas, verduras, legumbres, cereales, pescados, huevos, lácteos, etc, lo que te permite una increible cantidad d ecombinaciones. Ten mucho cuidado con las llamadas dietas milagro (de la alcachofa, de la piña, de la sopa, etc.).
  2. Muchas dietas se diseñan siguiendo falsas creencias: “el agua durante las comidas engorda” o “el pan integral ayuda adelgazar”. Por lo tanto es mejor seguir un régimen proporcionado por un nutricionista.
  3. La falta de fibra ocasiona estreñimiento, lo que produce sensación de pesadez e hinchazón.
  4. Si la dieta no especifica las cantidades, puedes correr el riesgo de abusar, por ejemplo, del aliño de la ensalada. Es mejor que añadas el aceite de oliva con un pulverizador y no directamente de la botella. La diferencia puede representar hasta 300 calorías.
  5. Si el régimen te obliga a preparar platos distintos para ti y para el resto de la familia, las posibilidades de éxito se reducen considerablemente. Ten en cuenta que una alimentación saludable beneficia a toda tu familia, solo tienes que introducir pequeños cambios: en la guarnición (ensalda para ti y patatas o arroz para ellos) y añadir salsas en carnes y pescados solo para tu familia.
  6. La forma de cocinar puede sumar calorías a tu receta. En una dieta lo mejor es preparar los alimentos, al vapor, al horno o en papillote.

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