En los últimos años, la cosmética está demostrando un alto poder terapéutico en los hospitales franceses. Los resultados de su utilización en mujeres afectadas por el cáncer invitan al optimismo. Tanto médicos como pacientes coinciden en afirmar que la utilización de maquillaje combate con acierto la descamación cutánea provocada por la quimioterapia, devuelve al rostro el aspecto perdido y contribuye a redefinir rasgos como los ojos y las cejas, por ejemplo. Además, todos estos productos de belleza distraen a las pacientes, reduciendo su nivel de estrés, ayudándolas a hacer frente a su enfermedad, a tolerar el peso de su carga y a recuperar la confianza en sí mismas.

También se han evaluado sus beneficios en personas que sufren anorexia, demostrando que el maquillaje les permite empezar a aceptar mejor su cuerpo y a dejar de huir del espejo. Se ha confirmado, incluso, que aumenta el buen humor. Al menos, esas fueron algunas de las conclusiones más interesantes a las que llegaron numerosos expertos y científicos franceses durante el simposio Cosméticos y calidad de vida que la firma L’Oreal organizó recientemente en Barcelona. Eso sí, sería un error concebir la cosmética como un método paliativo frente a algunos de los efectos secundarios derivados de los tratamientos médicos convencionales. Y es que la cosmética resulta beneficiosa, pero siempre como aliada de la medicina, nunca como un remedio por sí sola.

Fuente: http://www.psychologiesrevista.com/noticias/index_1.html

Este sitio web utiliza cookies para que usted tenga la mejor experiencia de usuario. Si continúa navegando está dando su consentimiento para la aceptación de las mencionadas cookies y la aceptación de nuestra política de cookies, pinche el enlace para mayor información.

ACEPTAR
Aviso de cookies