La base es lo más parecido posible a la coloración natural del rostro y debe elegirse acorde al tipo de piel (normal, grasosa, seca). Una vez encontrado el tono y la textura ideal se puede empezar a trabajar con las “correcciones”. Tenga en mente que una base mucho más oscura para tapar las imperfecciones es un gran error, no es el color de la base lo que se debe cambiar sino la forma en que se aplica el maquillaje.
Algunas ideas para corregir imperfecciones:
- Si posee una frente ancha y generosa y desea crear una sensación de que es más pequeña, le conviene oscurecer la zona más cercana al nacimiento del pelo, a lado y lado de la cara.
- Si su nariz es ancha y quiere que se vea más fina, oscurezca con base o rubor sus laterales.
- Una nariz larga se acorta colocando un poco de base en su punta.
- La barbilla o mentón puede maquillarse dando una imagen de menor tamaño, especialmente si es alargada. Aplique en el ángulo inferior un poco de base más oscura que la utilizada en el resto del rostro.
- Si su piel es clara pero con granitos, áreas rojizas, manchas y otras imperfecciones, ensaye disimularlas con una base de tono más claro en las zonas problemáticas. Esto aportará algo de luz.
- Las ojeras se disimulan con un corrector ligeramente más claro que el resto de la piel. Conviene difuminar un poco hacia el borde exterior del ojo. Recuerde no estirar la piel cuando lo aplique.
- Oculte las arrugas alrededor de los ojos con un poco de base muy ligera. Difumine para que no se vea exagerado y evite utilizar polvos, pues tienden a depositarse en ellas.
- No aclare las bolsas con la base. Utilice la misma coloración del resto de la piel. Si lo desea aplique un corrector y difumine.
Nadie es perfecto
Aceptar la forma de nuestro cuerpo es el primer paso para lograr una belleza integral. Resaltar nuestros mejores ángulos y disfrutarlo cuando lo hacemos es una manera de mejorar la autoestima, hacer aflorar la sensualidad y conseguir mayor seguridad en nosotros mismos. No se deje influenciar por los medios de comunicación que privilegian los cuerpos exageradamente delgados, las soluciones al instante y sin esfuerzo, la juventud (casi en exclusiva) y muchos otros aspectos que parecen estar fuera de la realidad. Los momentos de soledad o los minutos que le exigen ciertas rutinas como el maquillaje para traer a su mente los aspectos positivos de su físico y su personalidad. Tenga la seguridad de que si se sabe mimar los demás lo notarán.
